Llegaba del gimnasio. La noche estaba mas oscura que otras veces. Me daba un poco de miedo caminar por ahi. Pero tampoco podia quedarme en el gimnasio toda la noche. Asi que continue con mi caminata diaria. De pronto alguien vino corriendo hacia mi. Mi corazon se detuvo por un momento. Deje de respirar y luego vino la taquicardia. Esas cosas que siempre pasan cuando el susto te supera. No pude soportarlo. Y grite, grite muy fuerte. Pero al sentir del otro lado una risa senti un alivio. No eran ningun secuestrador desquisiado, aunque el de vez en cuanto tuviera ganas de hacerlo. Asi contaban. El problema no fue entonces que no era un secuestrador, sino que era esa persona que justamente hoy no queria ver. Era EL. Siendo sincera no queria pasar ese ridiculo frente a el. Todo mi trabajo, que habia hecho durante meses en hacerme la seria, la dificil se destruyo en un segundo. El solto una risa descabellada. No paraba de reirse. Al principio me rei, luego ya solo lo mire. Me senti muy avergonzada. Cuando paro de reirse, por cierto varios minutos despues, me abrazo y me dijo te amo. TE AMO? Que esas cosas no le dicen los novios a las novias? o viceversa. NO NO NO. con e no era nada. O hasta ese momento en que nos miramos a los ojos. Esta mirada fue mucho mas profunda de lo que suelen ser las simples miradas, pude ver algo que no veia antes. El era el tipico chico popular, de un colegio popular de la ciudad, y era de los que no miraban a todas las chicas. Miraban solo a aquellas chicas iguales a el. Yo no era tan diferente a decir verdad. Solo que no era la popular. Conocernos en el gimnasio parecia ser una buena idea. Hablabamos seguido, y nos reiamos mucho. Pero nunca pense que pasaria a algo mayor. En varias fiestas me lo habia encontrado, y me habia saludado, muy bien. Hasta me habia presentado a sus amigos. No parecia ser el chico que yo creia. Era diferente. Hasta en su sonrisa no parecia ser una mala persona, todo lo contrario.
Luego del abrazo y la mirada, me pregunto como estaba. Y ahi comenzamos a hablar. Fue una charla simple, nos reiamos como siempre, pero ahi llego lo que esperaba inconsientemente. Me pregunto a donde salia ese fin de semana, si hacia algo a la tarde, aclaro. Me parecio raro. Nos llevabamos perfecto. Pero no esperaba preguntas como estas. Le dije que no creia que hiciera nada, o tenia que organizar algo. El me propuso juntarnos, a charlar como amigos. Hablar de cosas de la vida. CONFIESO que por dentro algo de mi gritaba muy pero muy fuerte. Parecia que iba a explotar de felicidad, fue un extasis momentaneo. y solo respondi con un Bueno!. Nunca supe si era apropiado, o no. sinceramente el orgullo fue mas fuerte que yo, y no mostre ni una pisca de alegria. Cuando vi su cara, un poco seria, le sonrei, y repeti simplemente DALE, estaria re bueno. En ese momento su rostro parecio pasar de un estado de congelamiento a lo que en verdad era su cara normal.
En el fondo creia que yo era la persona que el necesitaba, pero no queria hacerme ilusiones. Como ya habia pasado otras veces, la amistad o el amor se esfuma y rapidamente ellos volvian con sus chicas faciles, como suelo llamarles yo. El parecia un poco entusiasmado y con ganas de tener algo serio, o un poco mas serio que lo comun.